viernes, 4 de abril de 2008

nara

Nara es otra cita obligada del Japón tradicional o clásico. Como Kyoto, fue capital del imperio en el siglo VIII, por lo que se conserva un buen número de edificiaciones de lo que se llama, lógicamente, el periodo Nara.

El mayor highlight the Nara es el templo Todai-ji, se dice que es la construcción de madera más grande del mundo que alberga, como no podía ser de otra forma, uno de los Budas más grades que se conservan. Es una estructura impresionante, es increíble lo grande que es y creo que hay que saber mucho de cálculo de cargas y estructuras para diseñar semejante armatoste, hueco y que se conserve durante tanto tiempo en una tierra proclive a terremotos, tifones, bastante húmeda y con dos ataques atómicos en el último sigle. El templo Kofuku-ji, con su pagoda de cinco niveles también me gustó mucho.

La parte más fotografiada de Nara, curiosamente, es un inmenso parque plagado de ciervos que campan a sus anchas y que a veces se internan en la ciudad. El parque está lleno de linternas japonesas y templos semiderruidos entre la vegetación, con lo que la escena resultante es bastante bucólica y evocativa.

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