miércoles, 2 de abril de 2008

kyoto

Kyoto antigua capital del imperio, es una ciudad pequeña y no muy industrializada para los standards de Japón. Tal vez por ello, fue, junto a la cercana Nara, uno de los pocos enclaves que los bombardeos norteamericanos de la segunda guerra mundial respetaron.

Visitamos el Golden Pavillion (Kinkaku-ji), el Palacio Imperial (Nijo-jo), y los templos Kiyomizu-dera y Sanjusan-dendo. También el barrio donde se encuentra el mayor número de escuelas de Geishas de Japón.

La comida fue interesante, en un restaurante japonés ambientado en el periodo Edo con un performance basado en guitarra tradicional japa y Geisha. Aunque era un poco cheesy o touristy, me encantó, la actuación era muy sencilla, elegante y delicada, con unos movimientos muy cuidadosos. Era interesante como era capaz de transmitir muchas emociones solo con la mirada, ya que el resto de la cara permanece inmóvil durante todo la actuación. Es bastante emocionante, por el tono de la guitarrilla y todo el aura del kimono, el peinado, etc.

Compré uno de los tres únicos souvenirs que me he traído: dos tazas Raku de té de cerámica japonesa clásica que se usan en ceremonias formales de té como la que estuve hace ya algún tiempo. Son caras de cojones, dos tazas son 12,000 yenes (unos 90 euros) pero bueno, es una pieza clásica hecha a mano y supongo que es de gente bien comprar esas cosas. Este es el modelo que compré.

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