El último día de trekking se planteaba duro. Serían 8millas, por lo que decidimos madrugar bastante y a las 7 estábamos ya pateando. Nuestra motivación: alcanzar por fin la civilización: una ducha con jabón, una cama limpia y un buffet libre eran suficiente motivación como para caminar 10 horas seguidas, escalando y subiendo colinas. Una auténtica paliza, nuestras estimaciones eran de un gasto de 3,700-4,000kcal.
Lo primero que hice al alcanzar Kee Beach fue darme un baño y lo siguiente, directamente al supermecado a comprar COMIDA. Y directamente fuera del supermecado, prácticamente en la acera, nos dimos un tremendo atracón. Coca cola, patatas, donuts, fruta, queso…. Todo lo que caía en nuestras manos era devorado sin compasión. Era divertido ver cómo todos arrasabamos con bolsas y bolsas de COMIDA.
A continuación, fuimos a nuestro hotel, Quest Resort. Un típico complejo de playa, con muchas habitaciones, piscina agradable con cocktails, y muchos restaurantes. Fue una catársis encontrar una habitación con AC, frigorífico y muchas toallas limpias. La cena, fue un placer, después de haber llenado el estómago lo suficiente, pudimos saborear todo mucho mejor. Yo tomé un pescado hawaiiano (poweh) bastante sabroso y una mousse de chocolate. El día acabó con todos en el jacuzzi exterior con Piña-Coladas y Mai-Tais.
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